
Imagina que hoy es el último día de tu vida।Mirá hacia atrás, hacia tu historia y hacé la lista de aquellas personas a quienes, por cualquier razón, nunca pudiste, o no supiste expresarles la gratitud que se merecían।Alguien que te ayudó a conseguir el trabajo que querías, alguien que supo darte un buen consejo, alguien que no ejerció sobre vos la venganza que te merecías, alguien que te prestó su hombro para llorar una desilución, alguien que te escuchó y nunca repitió una palabra de lo que dijiste, alguien que cuando necesitaste ayuda te la dio sin pedir nada a cambio....A lo mejor hace mucho que no los ves, pero si te lo propones seguramente los encontrarás.Si alguien nos ha dado algo, es porque hemos necesitado algo. Es decir, alguien es testigo de alguna carencia nuestra.Agradecer es reconocer, a contrapelo de nuestro tramposo amor propio, que alguna vez, alguien nos ha sido necesario.¿Ya hiciste la lista? Bueno, empezá a llamarlos.....NUNCA ES TARDE PARA SER AGRADECIDOS.
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