Aunque sientas el cansancio; aunque el triunfo te abandone; aunque un error te lastime; aunque un negocio se quiebre; aunque una traición te hiera; aunque una ilusión se apague; aunque el dolor queme los ojos; aunque ignoren tus esfuerzos; aunque la ingratitud sea la paga; aunque la incomprensión corte tu risa; aunque todo parezca nada; ¡VUELVE A EMPEZAR!

CUANDO LAS DIFICULTADES TE AGOBIEN,...





Permíteme orar,
no para obtener protección contra los peligros,
sino para afrontarlos sin temor.

Permíteme pedir,
no alivio a mi dolor,
sino el valor de superarlo.

Permíteme buscar en el campo de batalla de la vida,
no aliados,
sino propia fortaleza.

Permíteme no suplicar, temeroso, por mi salvación,
pero sí tener paciencia para conseguir mi libertad.

Concédeme
que no sea un cobarde,
sentir tu misericordia en mi triunfo, solamente;
pero deja que, en mi fracaso,
encuentre el apretón de tu mano.

No hay comentarios:

Pensamientos y reflexiones,

Para reflexionar


Piensa en los que no tienen qué comer cuando rechaces tu comida