SOL Y LUNA, LUNA Y SOL

Era negra eternidad lejos de tu abrazo

dolor que se aferraba tan fuerte en las entrañas

insomnio de tinieblas eran su canto

fúnebres notas alrededor si ser llamadas

danzaban extendiendo su negro manto

bosques que impedían la entrada

tan espesa maleza convertida en llanto

lumbral sin luz en la oscuridad no deseada.



Así un tiempo el destino ordenó

eras rebelión del alma que protestaba

buscando en la penumbra latente el candor

de esa eterna y envolvente mirada

brazos que disfrutaban la dimensión

de cuerpos fundidos en gigantes llamaradas.



A lo lejos se revelaba una suave canción

sus notas se aproximaban cada vez mas claras

llegó la nitidez, era el sello del eterno amor

en las venas de un solo corazón se escuchaban

dos almas vencidas por un inmenso dolor

que suavemente con caricias dulces se despertaban.



Nítida visión hacia arder al sol

con su luz infinita a la luna esperaba

sonreía pensando en el choque de esa unión

donde las arterías del amor se medraban.



Sol y luna, luna y Sol

se eclipsaron esperando el alba

nadie pudo escuchar el melodioso canto

de ese encuentro que por tanto tiempo buscaban.

Casal