Aunque sientas el cansancio; aunque el triunfo te abandone; aunque un error te lastime; aunque un negocio se quiebre; aunque una traición te hiera; aunque una ilusión se apague; aunque el dolor queme los ojos; aunque ignoren tus esfuerzos; aunque la ingratitud sea la paga; aunque la incomprensión corte tu risa; aunque todo parezca nada; ¡VUELVE A EMPEZAR!

Dios ha contado tus lágrimas



Cuando crees que tu vida se ha detenido y el tiempo solo pasa... Dios espera contigo.

Cuando estás solo y tus amigos están muy ocupados, aún para una llamada ... Dios está a tu lado.

Cuando has tratado todo y no sabes hacia donde ir... Dios te mostrará el camino

Cuando nada tiene sentido y estás frustrado sin saber hacia dónde ir... Dios tiene la respuesta.

Si de repente tu mirada al mundo exterior se hace más brillante y encuentras senderos de luz... Dios te ha susurrado en el oído.


Cuando las cosas van bien, y tienes mucho que agradecer... Dios te ha bendecido.

No importa si te sientes bien o mal. Dios siempre está contigo y te acompaña en las buenas y en las malas.

Nunca dejes de hablar con Dios y contarle tus problemas, pues muchas personas buscan a alguien con quien hablar y desahogarse, sin embargo no hablan con el único que siempre va a escuchar con misericordia y paciencia, sin sacar a relucir tus errores.

Busca a Dios de corazón y cuéntale tus problemas, pues El siempre te acompaña y te cuida... lo creas o no... te guste o no... Él nunca te abandona... porque te ama



Muchas veces nos caemos y nos volvemos a levantar quien es el único que esta para darte una mano en esos momentos?


DIOS el único es él porque los amigos muchas veces fallan también con nosotros él que nunca falla es el por eso es que tenemos que darle el valor justo y necesario.

Pero nosotros fallamos mucho con el tal vez demasiado, pero QUE ?


El jamás nos negó nada jamás se olvido de nosotros por el hecho de que fallamos con El al contrario nos perdona y nos ayuda por sobre todas las cosas.

No hay comentarios:

Pensamientos y reflexiones,

Para reflexionar


Piensa en los que no tienen qué comer cuando rechaces tu comida